Once tripulantes aún tienen el virus y deberán estar en aislamiento en el campamento del Aromo

David Ramírez*

Once de los 29 tripulantes del barco atunero “Charo” dieron positivo en las pruebas PCR a las que fueron sometidos a su arribo a Manta el martes y en consecuencia son portadores del virus SARS-CoV-2 que produce la enfermedad COVID-19.

Los 11 pescadores fueron trasladados el mediodía de este viernes al centro de aislamiento del Aromo (sureste de la ciudad), acondicionado en el campamento del fracasado proyecto de refinería El Pacífico.

En el malecón de Manta para ir al centro de aislamiento sanitario en el Aromo (Enviada por David Ramírez).

Toda la operación logística de desembarco como de traslado al centro del Aromo estuvo supervisada por personal de la Dirección Distrital de Salud, bajo el liderazgo del doctor Kelvin Carranza, responsable de la seguridad de puertos de la entidad.

“Los 11 pescadores serán monitoreados en el centro de aislamiento hasta queden libres del virus. Al momento están asintomáticos, respiran normalmente y la temperatura corporal es normal. Se muestran optimistas y contentos de estar en tierra y cerca de sus familias”, dijo Carranza.

Al ser consultado por los otros 18 tripulantes que dieron negativo a la prueba PCR, el médico dijo que aún permanecen a bordo del “Charo”. “Queda a criterio de ellos y del armador, si hacen la cuarentena en la embarcación o en sus hogares. Hemos procedido de acuerdo con el instructivo para los casos de pescadores con el virus”, subrayó.

Un guía los instruye al llegar a el Aromo (Enviada por David Ramírez).

En representación del armador del barco “Charo” -propiedad de Conservas Isabel- intervino la agencia naviera Marnizam.

Con el retorno de la tripulación a Manta, el aislamiento de los 11 pescadores aún positivos de COVID-19 y los 18 que no tienen el virus, la odisea de casi dos meses a bordo del “Charo” concluyó afortunadamente, con felicidad.

Los pescadores fueron traídos por una lancha hasta el muelle adyacente al Yacht Club, desembarcaron por sus propios medios y caminaron hasta el malecón donde los esperaba un bus amarillo que los llevó hasta el Aromo. Los hombres vestían ropa de “calle”, cubrían sus rostros con mascarillas y portaban pequeños maletines, seguramente con sus efectos personales.

Un delegado del Distrito de Salud 13D02, en el Aromo, les hace saber el protocolo de bioseguridad que deben observar mientras permanezcan aislados (Enviada por David Ramírez).

El “Charo” salió a faenas de pesca el 30 de abril y en medio del Pacífico Sur, a unos 8.000 kilómetros de las costas de Ecuador, a la altura de la Polinesia Francesa, varios tripulantes presentaron problemas respiratorios y solicitaron auxilio en puertos del área.

El 20 de mayo, la tripulación completa dio positivo de COVID-19 luego de ser sometida a la prueba en la isla Tahití, en la Polinesia Francesa. Dada su gravedad, el pescador Jhonny Mero de 47 años fue hospitalizado, logrando restablecerse y fue dado de alta el 10 de junio, según se conoció a través del Alto Comisionado Francés, como se denomina la autoridad de gobierno de ese archipiélago.

Entre abril y mayo murieron al menos una docena de pescadores entre Manta y Jaramijó, entre ellos cuatro capitanes de barco. Al desatarse la crisis de contagio con COVID-19 en la flota pesquera, los pescadores fueron dejados en cuarentena en las embarcaciones. Más tarde, dada la presión de familiares y la ciudadanía, se decidió llevar a los pescadores infectados al centro de aislamiento que se acondicionó en el Aromo.

El primer chequeo médico al ingresar al centro de aislamiento en el Aromo (Enviada por David Ramírez).

El portavoz de la Asociación de Atuneros de Ecuador (ATUNEC), Luigi Benincasa, dijo que en algún momento de la crisis hubo 16 barcos en cuarentena. Así mismo, reconoció que murieron 3 pescadores.

A pesar de que ATUNEC ha insistido que la flota es sometida a rigurosos protocolos de bioseguridad para impedir contagios, se han registrado casos de barcos con tripulaciones que aparentemente parten sin la enfermedad, ya en el mar han presentado síntomas y se han visto precisados a retornar.

Como es de dominio público, cuando se dieron casos con tripulaciones sospechosas y confirmadas con COVID-19, se las dejó en cuarentena en la rada del puerto y como resultado, muchos pescadores murieron.

* David Ramírez, periodista ecuatoriano residente en Estados Unidos, es editor en El Diario de Nueva York. FOTO DESTACADA: Los pescadores al momento de desembarcar en el muelle adyacente al Manta Yacht Club (Enviada por David Ramírez).

El tratamiento médico que reciben y las reglas de comportamiento que deben cumplir

A su llegada se les comunicó a los pescadores que serán asilados en este lugar por 14 días. Se les recordó la prohibición de beber o fumar, así como los cuidados a tener y los protocolos de atención médica, y el procedimiento en caso de emergencia.

Antes de pasar a las casas donde se alojan, fueron valorados por el personal médico. Se tomó la presión y los signos vitales, además de revisar la saturación y el oxígeno. También se verificó el peso y la talla para llenar la historia clínica de cada uno.

En esta zona de aislamiento donde se reciben personas con covid-19 confirmado, sea leve o asintomático, el personal de salud realiza visitas diarias y su frecuencia varía dependiendo de la condición o presencia de síntomas de cada paciente.

Además, en cuanto a la alimentación, se hace una nutrición especial en caso de detectar enfermedades de comorbilidad, como diabetes.

Paola Castillo, directora (e) del Distrito de Salud, señala que para acceder al servicio en esta zona de aislamiento, los pacientes deben primero acudir al centro de salud más cercano, para realizar el trámite pertinente para su respectivo ingreso, siempre y cuando sea positivo de covid-19. “Estamos comprometidos con todo nuestro personal médico, tanto en esta zona cuanto en el desplazamiento de brigadas en territorio”, afirmó la funcionaria.

En esta área cuya atención es de 24 horas, se encuentran 2 médicos, 2 enfermeras y 1 administrador médico, y desde el 12 de mayo hasta la actualidad han sido atendidas 73 personas.

FUENTE: Ministerio de Salud Pública del Ecuador, Distrito 13D02 (Manta), mediante boletín firmado por Rebeca Alarcón Mieles.- 19-06-2020.