Al parecer no fue acertado que el Concejo municipal delegue la organización de la Feria del Comercio de Manta 2016 a la “Unión de Asociaciones de Comerciantes Minoristas Floresmilo Mendoza Catagua de Tarqui”, porque en pleno desarrollo del evento se ha provocado un conflicto de intereses, que la propia Administración municipal ha zanjado clausurando parcialmente la feria.
La información municipal que hemos recibido carece de claridad, pero colegimos que el problema deviene del hecho que los comerciantes llegados de otros lugares del país venden su mercancía a menor precio del que cobran sus pares locales y estos piden por eso que aquellos sean marginados de la feria. Pero la Unión ha cobrado a los primeros un derecho de participación en la feria mucho más alto que el pagado por los segundos. Llegados a este punto “arde Troya” y se arma el lío.
Entre acusaciones mutuas que van y vienen, unas más maliciosas que las otras, la Administración municipal decide intervenir y poner coto al asunto. Mediante sus direcciones de Gestión Ambiental y de Higiene, más la Comisaría de Servicios Públicos, en la mañana de este viernes 28 de octubre notificó a los comerciantes que llegaron de afuera, haciéndoles saber el malestar existente entre los comerciantes de Tarqui debido a la competencia desleal que aquellos representan.
Pero en el recinto ferial los servidores municipales hallan algo peor: Un ambiente insalubre y desordenado y el cobro no autorizado de un canon por el uso del espacio que ocupan los comerciantes afuereños. De esta situación se informa el Alcalde de Manta y dispuso la clausura parcial de la feria.
Más de 200 comerciantes que llegaron a trabajar en las festividades del cantón dijeron haber pagado por la ocupación del espacio, mediante un contrato hasta el 4 de noviembre, por lo cual pidieron la devolución del dinero que fue pagado a la Unión “Floresmilo Mendoza Catagua”.
La Unión “Floresmilo Mendoza Catagua”, presidida por el abogado Jorge Mero, asumió directamente la organización de la feria, sin pasar por el requisito legal de concursar en oferta pública y pagando al Municipio solamente 27.000,00 dólares por el uso del espacio público, cantidad muy inferior a los más de 90 mil dólares que pagó el rematista del año pasado. Esta prebenda la justificó el Concejo municipal con la intención de facilitar a los comerciantes de Tarqui que generen ganancias para un capital semilla que les ayude a levantar sus negocios después de las pérdidas sufridas a causa del terremoto de abril.
Sin embargo, y pese a su compromiso de presentar una feria ordenada y agradable, la Unión ha descuidado el tema ambiental, los planes de contingencia, la hidratación del suelo, la seguridad, aparte de cobrar a los comerciantes afuereños valores muy altos por el uso del mismo espacio público que los organizadores del evento pagaron a precio de ganga.
Los comerciantes de visita pidieron que se los deje trabajar durante este fin de semana, para recuperar algo de la inversión realizada para estar en la feria. Ellos son conscientes de que la responsabilidad en las irregularidades encontradas es de la Unión y por eso mismo consideran injusto que, a medio camino del evento, se pretenda marginarlos.
Víctor Merchán, un comerciante establecido en la Poza después del terremoto, hizo un llamado a sus compañeros de gremio para que dialoguen, teniendo como mediadores a los funcionarios municipales, a fin de hallarle solución satisfactoria al problema.
Mientras tanto, las autoridades municipales dispusieron esta tarde que las ventas de los comerciantes de paso cesen y se retiren del recinto ferial.
FUENTE: Dirección de Comunicación Social del GAD cantonal de Manta, mediante boletín informativo y fotos con firma de su directora encargada, periodista Eva Moreta Delgado.- MANTA, 28 de octubre de 2016.
REVISTA DE MANABÍ 