Debido a la enfermedad COVID-19, convertida en pandemia por el coronavirus SARS-CoV-2 que la propaga, los bares y las discotecas de Manta (Ecuador) han permanecido sin trabajar desde hace 18 meses. Pero esta situación cambió desde el fin de semana que cierra este domingo 12 de septiembre del 2021, porque las autoridades de salud del cantón autorizaron su reapertura en modo “restobar” (restaurante – bar).

Esta nueva experiencia, al parecer, empezó bastante bien. Testigos presenciales informaron a REVISTA DE MANABÍ que la Avenida Flavio Reyes, en cuyos lados se concentra la mayoría de esos establecimientos de servicios para diversión, se vio muy concurrida durante la primera mitad de la noche del sábado.

Por cierto, los dueños y los administradores de dichos negocios han asumido su corresponsabilidad en la aplicación de medidas de bioseguridad a fin de evitar que ellos, sus colaboradores y sus clientes contraigan la enfermedad pandémica.

Algunos de esos actores cuentan a continuación sus propias experiencias y revelan las precauciones que están tomando.

Discoteca transformada en «restobar». / GAD municipal Manta

Para Manuel Sabando, dueño del local “El Nuestro Bar”, en Plaza del Mar (Tarqui), abrir sus puertas nuevamente significa trabajo. “Esta es la oportunidad de esforzarnos, de ponerle dedicación. Hoy, más que nunca, no podemos tirar la toalla; somos responsables y pedimos lo mismo a nuestros clientes, porque queremos seguir trabajando. Por ello es indispensable presentar certificado de vacunación”.

Los desinfectantes se hallan dispuestos para uso general en cada establecimiento. / GAD municipal Manta

Patricio Pulla, dueño de la Discoteca Luxor, menciona: “aunque hoy ya no abrimos como una discoteca, nos hemos adaptado a las medidas y funcionar como restobares; pero lo más importante es que nuestros turistas y usuarios comprendan que mantener esto es trabajo de todos”.

Alerta bien visible para que nadie olvide su mascarilla protectora. / GAD municipal Manta

En la Administración municipal de Manta consideran una gran labor, por parte del sector turístico, haber adaptado sus locales y convertirse en restobares, para ofrecer la venta de alimentos y bebidas alcohólicas moderadas, en los horarios permitidos.

“Estamos evidenciando que juntos podemos llevar adelante la ciudad”, mencionó Johanna Benítez, dueña del restaurante QDQ. Su local funcionaba como restaurante, pero tras la apertura de los demás evidenció más clientela y con ello más circulación económica.

El interior de un restobar. / GAD municipal Manta

Benítez comentó: “Son muchos los beneficios que nosotros hemos ganado al cambiar nuestro modelo de negocio. Primero, porque podemos vender comida desde temprano; no siempre se sale a beber sino a comer, y las personas salen con más confianza”.

FUENTE: Comunicado y fotos con firma de Gema Arteaga Briones, relacionista pública en el Gobierno Autónomo Descentralizado (GAD) del Cantón Manta, provincia de Manabí, República del Ecuador.

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