En el marco de las diversas actividades realizadas a lo largo del mes de marzo que acaba de pasar, dedicado a que las personas adultas mayores conozcan bien cómo cuidar sus riñones, hubo algunas específicas para promover el ejercicio físico y la alimentación saludable, con un poco de diversión.
Fueron actos desarrollados expresamente para las personas beneficiarias del Programa de Envejecimiento Activo habilitado en el Hospital General Portoviejo, dependencia del IESS (Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social).
Se puso especial énfasis en la ejercitación física constante; y, por esto, mientras duró el “mes del riñón” hubo un gimnasio móvil a fin de mostrar cómo hacer los ejercicios de forma correcta. Y, complementariamente, se hizo demostración de cómo alimentarse de modo saludable.
Aparte de lo ya mencionado hubo una caminadora y una bicicleta, ambas estáticas, que fueron utilizadas por los adultos mayores que fueron parte de una revista de gimnasia dirigida.
La razón de todos esos actos, según la directora médica del Hospital, Vanessa Villavicencio, es la necesidad de realizar actividad física a cualquier edad, indicando que esto es más necesario a partir de los 40 años como forma de prevenir enfermedades, entre ellas las de tipo renal.
Un adulto mayor que se beneficia del Programa de Envejecimiento Activo, participante de una danza española, reconoció que los ejercicios físicos y una alimentación balanceada son buenos para las personas de la tercera edad, ya que eso permite estar activos e ingerir los nutrientes que se requieren para tener buena salud.
El Programa de Envejecimiento Activo atiende a más de 200 personas jubiladas, que son parte de varios talleres que les permiten estar activos y gozando de buena salud.
FUENTE: Hospital General Portoviejo, del IESS (Ciudad de Portoviejo, Ecuador), mediante boletín y foto enviados a través de su comunicadora social Margarita Pérez Verduga.
