La juventud de Manta (ciudad de la provincia de Manabí, Ecuador) enfrenta serias preocupaciones sobre su futuro laboral, además de enfrentar desafíos relacionados con el acceso a la educación superior, la inseguridad ciudadana y los servicios básicos.
Estos hallazgos provienen del diagnóstico «Juventudes de Manta: Perspectivas y datos sobre su situación actual», desarrollado como parte de la iniciativa Our City (Nuestra Ciudad, en español).
El diagnóstico, realizado de manera participativa con jóvenes, organizaciones de la sociedad civil y autoridades locales, incluye datos obtenidos a través de una encuesta a más de 900 personas y grupos focales.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC, 2022), la población de Manta de entre 15 y 24 años representa el 18,25 % del total. De este grupo, aproximadamente 7 de cada 10 jóvenes viven en las parroquias de Manta y Tarqui.

Our City es un programa global de la Fundación Botnar, que busca transformar ciudades de forma colaborativa, para mejorar la calidad de vida y las oportunidades para los jóvenes. Esta iniciativa se implementa en cinco países, siendo uno de ellos Ecuador; aquí, la iniciativa lleva el nombre de Manta Mía y está siendo implementada por FARO.
María Sol Cevallos, coordinadora territorial del proyecto, explica que Manta Mía se encuentra en la fase inicial (2023-2026), con el objetivo de desarrollar un diagnóstico participativo de las necesidades juveniles, fundamental para garantizar el bienestar de los jóvenes del cantón.
La iniciativa Manta Mía aspira a co-crear una ciudad sostenible, inclusiva, innovadora y segura, abordando tanto las necesidades juveniles como los retos globales actuales, como el cambio climático. Para lograr estos objetivos, se promoverán acciones colectivas y se utilizarán herramientas digitales y nuevas tecnologías.
Incertidumbre por el futuro laboral
El estudio revela que una de las principales preocupaciones de los jóvenes es su futuro laboral. Según el INEC, solo el 26 % de los jóvenes de 15 a 24 años están ocupados laboralmente. A pesar de que Manta es una de las 10 ciudades más importantes para la economía del Ecuador, con un gran potencial para generar oportunidades laborales.

De los jóvenes que trabajan, el 50 % lo hace en sectores como servicios de alojamiento y comidas, comercio y manufactura. Además, el 50 % de las mujeres jóvenes que no trabajan se dedican a tareas del hogar.
Acceso a la educación y crecimiento
El bajo acceso a la educación superior es otra preocupación significativa. Datos del INEC indican que, en la zona urbana, solo el 40 % de los jóvenes de 20 a 24 años están en estudios superiores; mientras que, en la zona rural, esta cifra es del 10 %.
En general, solo el 40 % de los habitantes del cantón han completado la educación general básica, el 30 % ha finalizado el bachillerato y el 20 % ha alcanzado la educación superior.
La encuesta indica que el 20 % de los jóvenes de Manta están interesados en estudiar ingeniería, industria o construcción, mientras que otro 20 % se inclina hacia salud y bienestar.
Los grupos focales revelan que los jóvenes consideran que una educación de calidad les permitirá mejorar sus oportunidades laborales, personales y de salud, además de contribuir positivamente a la ciudad.
Estas aspiraciones muestran un gran potencial para el desarrollo de la ciudad, pero también revelan la necesidad de ampliar las oportunidades de educación superior.
Inseguridad
En cuanto a seguridad, la encuesta muestra que el 50 % de los jóvenes hombres y el 40 % de las jóvenes mujeres se sienten muy seguros en sus hogares. Sin embargo, muchos jóvenes se sienten incómodos en ciertos espacios de la ciudad debido a problemas de seguridad y acceso. Los jóvenes de la comunidad LGBTQ+ reportan sentirse más inseguros en paradas de buses y transporte público.
Servicios básicos
El acceso a servicios básicos también es una preocupación, especialmente en las zonas rurales. En estas áreas, solo el 4 % de la población joven tiene acceso a alcantarillado, mientras que en las zonas urbanas, el acceso es del 91 %. En cuanto a internet, el 88 % de los jóvenes rurales tienen acceso, frente al 96 % en áreas urbanas.

Otros hallazgos
- El 70 % de los jóvenes de la zona rural se sienten respaldados por sus familias, mientras que en la zona urbana, el respaldo es del 40 %.
- El interés en la participación política es bajo debido a una percepción negativa de la política y sus actores; solo el 10 % conoce los mecanismos de participación disponibles.
- El embarazo en adolescentes de 10 a 19 años aumentó en más del 80 % en 2023, y los jóvenes consideran que estos embarazos y violaciones son motivos de discriminación que pueden llevar a la exclusión social y familiar.
- Solo el 10 % de los jóvenes realiza actividad física más de una vez a la semana.
- Los jóvenes se mueven principalmente en bus, con una mayor preferencia por el taxi entre las mujeres jóvenes.
- La discriminación, especialmente por apariencia y vestimenta, es la forma de violencia más común entre los jóvenes, afectando su experiencia en instituciones educativas, transporte y espacios públicos.
- Los jóvenes sienten que su voz no es valorada en espacios públicos, colegios y universidades, con una percepción particularmente negativa en la zona rural.
- La población joven se involucra con iniciativas medioambientales, pero muchas deben centrar su preocupación y esfuerzo en solventar necesidades básicas e inmediatas, por lo que el tema ambiental queda en segundo plano.
“El diagnóstico es crucial para comprender los desafíos y necesidades de los jóvenes de Manta. La iniciativa busca generar oportunidades en áreas como educación, participación en la toma de decisiones y desarrollo de competencias técnicas y profesionales. Los datos del diagnóstico serán fundamentales para el diseño de políticas públicas orientadas a la juventud de la ciudad”, concluye María Sol Cevallos, coordinadora del proyecto Our City de Manta.
FUENTE: Fundación Faro (Manta, Ecuador), mediante boletín y fotos remitidos a través de la agencia Icare Comunicación, con firma de Ligia Cueva.
