Proporcionar atención médica al instante y reducir la movilidad de las personas en la ciudad de Portoviejo (Ecuador), a esto se atiene el proyecto piloto denominado Puestos de Salud Inmediata (PSI), habilitados conjuntamente por el Ministerio de Salud Pública (MSP) y el Gobierno municipal de aquella urbe.
Los objetivos son varios, como incrementar la efectividad en la identificación de los posibles casos positivos de COVID 19, evitar el colapso de los centros de salud y dejar espacio para casos crónicos, establecer los cercos epidemiológicos, y llegar con la ayuda humanitaria a las familias afectadas.
“Queremos que la ciudadanía se sienta segura al saber que cuenta con un lugar cercano para ser atendida”, dijo Byron Joza, subdirector cantonal de Servicios Públicos.
El MSP y el GAD municipal gestionan la entrega del equipamiento y la protección del personal médico; el Cuerpo de Bomberos tiene a cargo la capacitación del personal y trasladar a los pacientes en emergencia; y los comités de Riesgos y Emergencias Barriales deben identificar las sedes, que pueden ser espacios públicos, comunitarios o religiosos, de fácil acceso, y conseguir al personal médico del barrio.
Las entidades de seguridad, como Fuerzas Armadas y Policía Nacional, harán rondas diariamente y además se cumplirá con la desinfección por termo nebulización y el lavado constante de las calles adyacentes.
El equipamiento de un PSI
El espacio donde funcionará este plan piloto, único en el país, contará con tanque de oxígeno y camilla; equipo médico, como tensiómetro, estetoscopio, pulsioxímetro, y termómetro; medicina básica, como paracetamol, suero oral, azitromicina, loratadina, oralsept y equipo de bioseguridad para el personal.

Los horarios de atención, en el inicio, serán desde las 07h00 hasta las 22h00. Sin embargo, la meta es atender las 24 horas con la rotación del personal en 3 turnos.
Habrá entre 71 a 75 puestos en Portoviejo, y se incrementarán dependiendo de la densidad poblacional y la necesidad de cada sector. Lo mismo ocurrirá en las 7 parroquias rurales.
El primer PSI en ser habilitado es el del Club San Pedro, de Picoazá, ubicado al frente del cementerio. Byron Joza explicó que esta parroquia tiene 6 barrios y 3 reasentamientos, por lo tanto se ubicará un puesto en cada uno de todos estos puntos.
Pedro Pablo Vélez, presidente del Consejo Barrial de Picoazá centro, dijo que con este plan se sienten protegidos al saber que no tienen que recorrer toda la ciudad para ser atendidos en caso de sospechas de contagio de COVID-19.