Desde su época como cadete, David Maldonado veía entrenar a los comandos del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) y se ilusionaba porque anhelaba ser parte de aquella unidad que admira por el aprendizaje que adquieren sus integrantes.
Maldonado es subteniente y laboraba en el servicio preventivo del distrito 9 de Octubre de la zona 8, cuando decidió conformar, junto a 163 policías, la XVII promoción del curso avanzado del GIR y aspirar a cumplir su meta tan anhelada.
El proceso lo inició hace tres meses con entrenamientos en Quito y Guayaquil. El domingo 18 de septiembre llegó a Manabí para continuar su aprendizaje en el cuartel de la unidad en la zona 4, acompañado de 30 compañeros que aún permanecen en el curso.
Hecho histórico
Este viernes 23 de septiembre cumplió una fase más, en un hecho calificado por el mayor Emerson Luna, comandante del GIR en la zona 4, como histórico, debido a que desde la creación de la base del GIR en Manabí, es la primera ocasión que los integrantes del curso avanzado entrenan en ella.
“Esta base está diseñada para ser un centro de entrenamiento a nivel nacional e internacional para policías. Es importante que se estén formando nuevos miembros que deseen integrar las filas del grupo. Durante la semana hemos cumplido con una fase muy fundamental, como son los derechos humanos”, expresó Luna.
El capitán Cristhian Suárez, jefe de operaciones del GIR en la zona 4, dijo que durante esta última semana la capacitación ha consistido en la pirámide del uso de la fuerza, elementos básicos, normas principales para la elaboración de un parte, principios internacionales sobre el uso de las armas de fuego y armas no letales, como el agente esparcidor de pimienta y el material CS (gas lacrimógeno).
“Los alumnos deben ser sometidos al gas pimienta para que conozcan los efectos que causa en una persona. Con esto se logra que eviten su uso excesivo en contra de alguien. También se les ha enseñado el uso correcto de la máscara antigás, ejercicios de confianza como el cambio de filtros y en caso de no contar con la máscara es necesario, como miembro del GIR, otro tipo de alternativa en el momento de tratar de salvar a una persona”, manifestó el capitán.
Una mujer
En primera instancia ingresaron 15 mujeres al curso, pero por motivos personales 14 tuvieron que desertar. La subtenienta Amanda Perachimba es la única fémina que quedó. Ella siente el respaldo de sus compañeros y asegura que si Dios lo permite será la primera mujer operativa del GIR.
“Es una Unidad muy diferente a las demás, en la que se adquiere experiencia y profesionalismo. Todo lo que nos enseñan nos servirá en un futuro”, resaltó.
El sueño del subteniente Maldonado, de la subtenienta Perachimba y el de sus compañeros, se cumplirá al aprobar los tres meses que faltan de entrenamiento en Quito y Esmeraldas.
FUENTE: Ministerio del Interior, Redacción en Manabí, mediante boletín informativo, fotos y video.- MANTA, 29 de septiembre de 2016.