José Risco Intriago/Manta/06-08-19
La Agencia de Aseguramiento de la Calidad de los Servicios de Salud y Medicina Prepagada (ACESS), del Gobierno ecuatoriano, informaba hace poco, en Manabí, que la máxima prioridad de los organismos estatales responsables de la salud pública ya no es erradicar y evitar las enfermedades, sino cómo mejorar el alargamiento de la vida humana, que aumenta con el perfeccionamiento de las ciencias médicas y los recursos tecnológicos aplicados en este ámbito.
Por pura coincidencia, los descendientes de doña Olga Fátima Risco Intriago, ciudadana de Chone que acaba de cumplir sus 83 años de vida, se juntaron para celebrar este acontecimiento familiar e infundir ánimo a su ser más entrañable a fin de extenderle la existencia.

El suceso tuvo lugar en la hacienda que Olga Fátima y su esposo, Ángel María Zambrano Cedeño (ya fallecido), cultivaron con mucho trabajo y grandes privaciones para formar su propio núcleo familiar y desarrollarlo acorde a los requerimientos sociales presentes y futuros. El fundo se halla al pie de una cordillera en la Parroquia Santa Rita del Cantón Chone, en un sitio llamado Camareta, unos pocos kilómetros al nororiente de la ciudad. El encuentro familiar ocurrió el día sábado 3 de agosto del 2019, desde las 09h00 hasta las 03h00 del día siguiente.




Acudieron casi todos los hijos e hijas (incluyendo nueras y yernos), y toda su respectiva descendencia, desde nietos hasta tataranietos (hijos de los bisnietos). También lo hicieron las hermanas y los hermanos de la cumpleañera, y gran parte de quienes descienden de estas y estos, por consanguinidad o afinidad. Igualmente, unos primos hermanos de la misma generación a la que pertenece Olga Fátima.




En el recinto de la celebración había un claro ambiente de fiesta, con el Sol brillando y cuya luminosidad realzaba las formas polícromas de la abundante y hermosa vegetación del entorno. El acto social empezó con la misa oficiada por el sacerdote Alfredo Eras, párroco de la Iglesia Santa Rita de Casio, cuyas plegarias se fundieron con las de quienes allí estaban presentes para dar gracias a Dios por haber creado el universo y hacernos parte de él, y por permitir que Olga Fátima haya logrado una existencia dilatada y permanezca alargándola saludablemente en el porvenir.


Gil Alfredo, uno de los herederos y custodio de la casa original de la familia, hilvanó amables palabras para dar la bienvenida a toda la concurrencia; y, seguidamente, Ángel Exipión, el heredero varón de mayor edad, hizo la remembranza familiar.
Luego tomó la posta Olguita María, la heredera menor, quien se presentó a sí misma y a cada uno de sus hermanas y hermanos, con su respectiva familia. Anthony Barberán, “El ranchero romántico y cumbianbero”, dio una alegre y divertida serenata, mientras que el payaso Pulgarcito animó con concursos de juegos y bailes, en los que participaron niños y adultos (mujeres y hombres).















Después se eligió a las reinas del encuentro: señora Grety Zambrano Risco, señorita Pierina Zambrano Manzaba y niña Fátima Andrea Manzaba Zambrano; y, finalmente, todos bailaron al compás de la música fiestera del momento.

Entre acto y acto se sirvió sabrosa comida casera, además de haberse repartido la deliciosa torta dulce ordenada expresamente para la ocasión.



Siendo el centro de la reunión y de la fiesta, Olga Fátima recibió numerosas felicitaciones y regalos, mostrándose constantemente complacida pese a que desde hace algunos años carece de autonomía motora. Pero Dios la mantiene robusta y con mente lúcida, pudiendo disfrutar a plenitud de los diversos halagos que recibió y que sin duda han contribuido a motivarla para que siga viviendo feliz con el afecto de toda su numerosa y bien formada familia.