Representantes o delegados de diversas entidades no gubernamentales (ecuatorianas y extranjeras) inmersas en el cuidado del ambiente natural, acaban de reunirse en la Parroquia Honorato Vásquez del Cantón Santa Ana (Manabí, Ecuador) con sus pares de los organismos estatales competentes, para debatir acerca del deterioro que presenta la Cuenca del Río Portoviejo y hallar la forma de detenerlo y revertirlo.

Para esa reunión escogieron una fecha simbólica: el viernes 22 de marzo, Día Mundial del Agua, y muy a propósito de las recientes inundaciones en cultivos y poblaciones, causadas por el desbordamiento de aquel río. Reconocieron la complejidad de problemas derivados del represamiento artificial (Poza Honda) y de los que emergen alrededor a consecuencia de actividades desarrolladas por seres humanos. Está, por ejemplo, la incontrolable producción silvestre de lechuguinos o jacintos en el agua represada, que interfieren la navegación y generan gases y lodos tóxicos; y, en el entorno, el uso discrecional de agroquímicos y la creciente deforestación.

La reunión fue convocada por quienes ejercen la dirección del proyecto binacional de prevención de riesgo de inundaciones (INUNRED), ejecutado por las ONG CESA (Central Ecuatoriana de Servicios Agropecuarios) y AVSF Ecuador, contando con el financiamiento que provee la Dirección General de Protección Civil y Operaciones de Ayuda Humanitaria Europea (ECHO). Representantes de esos organismos acudieron para encontrarse con representantes de SENAGUA (Secretaría Nacional del Agua), MAG, CAMAREN, juntas de riego y del Foro de los Recursos Hídricos.

El evento tuvo lugar en la Casa de los Abuelos, ubicada en Honorato Vásquez del Cantón Santa Ana. Al calor de la discusión, Carlos Loor se sinceró: “Tenemos que todos ser honestos de los problemas que persisten en el Río Grande (Río Portoviejo) y no lanzar la pelota al otro”. Antes que él, sus compañeros de otras juntas de riego pedían al representante de la SENAGUA tomar medidas concretas frente a la realidad del sector campesino. Kenneth Macías, director de Agua Potable de SENAGUA Manabí, también fue franco y reveló las limitaciones que enfrentan las instituciones públicas al momento de articularse para ejecutar algunos proyectos en los territorios. Por esto surgieron de inmediato las palabras del director provincial del MAG: “Estamos dispuestos a dialogar con las entidades competentes para mejorar la gestión de recursos” y satisfacer “las necesidades del sector campesino con respecto al riego, la deforestación que disminuye la oferta hídrica, el uso de agroquímicos…”

Antonio Gaybor, del Foro Nacional de los Recursos Hídricos, propuso: “aprovechemos reuniéndonos en una mesa de trabajo todos (los) aquí presentes, para socializar diagnósticos técnicos y fomentar una hoja de ruta de las posibles aplicaciones de un plan integral de la cuenca.” Y así acordaron crear esa hoja de ruta en una próxima reunión, para presentarla en Manabí ante el Ministro del Ambiente y Secretario del Agua, Humberto Cholango. Advirtiendo que la ejecución de un plan de esas características no se hará de un día al otro, y menos sin la ayuda del Gobierno central, y peor si “Estamos ahora en un momento tenso para todos los sectores de la economía que quieren pedir una parte del préstamo (del) FMI al Ecuador”, concluyó al final de la reunión Carlos Zambrano, del CAMAREN.

FUENTE: INUNRED, mediante boletín informativo y foto.
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